viernes, 5 de febrero de 2010

EL COLUMPIO


Había frente a mi casa en el camino del faro, un árbol en el que los niños teníamos hecho un columpio, con una soga y una tabla con dos ranura, que nos servia de asiento, este columpio lo teníamos hecho en una rama que estaba muy cerca del tronco y nunca lo quitábamos porque siempre había algún niño montado jugando en el


Un día que estaba yo en mi casa me fui para el columpio y me puse a columpiarme y cuando estaba harto de pasearme, me puse a liarme en el columpio dando vueltas sobre mi mismo, (como si estuviera haciendo una trenza), a la vez que me iba liando, el columpio iba subiendo, de forma que llego un momento que los pies casi no rozaban el suelo.


Cuando vi que ya me quede casi en volanda, tome impulso con los pies, dando un empujón en el suelo, para desliarme muy rápido y así dar muchas vueltas, pero no conté con la proximidad del tronco con el columpio, y con la mala suerte que al tomar impulso se me fue el cuerpo para detrás sin darme tiempo a ponerme derecho ni a parar.


Que fue lo que paso? Que con el impulso que llevaba empecé a desliarme muy rápido, pero como tenia la cabeza boca arriba, como el niño del dibujo, cada vez que pasaba cerca del tronco me pegaba un chocon y como no atinaba a soltarme, vuelta a empezar otra vuelta y otro chocon en el tronco.


Hasta que mi hermana y Rita que estaban en la puerta de mi casa al escuchar los cochazo y los gritos salieron corriendo y me desliaron del columpio, llevándome a mi casa, me sentaron todo mareado en una silla y Rita que al estar casada con un americano, tenia un frigorífico empezó a ponerme hielo en la cabeza, con lo que se me alivio un poco, pero la cabeza la tenia con mas bulto que una vara de membrillo lo que me duro unas pocas de semanas….

2 comentarios:

MAMÉ VALDÉS dijo...

Habría que verte en los tiempos que corren en Eurodisney, teniendo que parar de emergencias todas la atracciones, para que tu no perdieras un brazo o la cabeza, por lo menos tendrías un buen botiquín en tu casa porque no se como estás vivo... un saludo.

Maripaz dijo...

Hola paso a dejarte mi saludo y darte las gracias por tu visita a mi blog.

Me he reido mucho con tu relato de travesuras-perdona-casi te matas...

Tienes un entrañable blog, que visitaré a menudo.

Saludos