sábado, 20 de febrero de 2010

ANTIGUAS RIADAS EN CHIPIONA





Como la cosa está de agua, he estado buscando en los archivos de fotos que me dejo mi hermano, y he encontrado estas fotos que pertenecen a una de las muchas riadas que se producían en chipiona.
Las fotos de Villa Caña, y de la de la gasolinera son de la riada del año 1978. La foto de la barca que esta navegando por detrás de Regla, es mas antigua creo, que es a finales de los 50 o principio de los 60, fue una de las mas grande que hubo en chipiona, donde por la parte de Santo Domingo tuvieron que desalojar a toda las familias que allí vivían, junto con los animales, en un camión.
Esto lo sé porque yo tenía una tía mía que vivía allí y nos lo contaba muchas veces como tuvieron que ir a por ello para sacarlos del campo. Ahora gracias a Dios aunque cae bastante agua, no nos podemos quejar.

jueves, 18 de febrero de 2010

COMUNION ACIDENTADA


Antiguamente unas de las costumbre u obligaciones de las iglesia, era de que las mujeres tenían que llevar un velo negro puesto en la cabeza cuando iban a misa, el cual era de un tejido muy fino con muchos dibujitos y encajes, y se lo aguantaban con unas horquillas al pelo.

Por regla general la misa siempre la ayudábamos dos monaguillo, por que antes tenía mas faena las misas que ahora, teníamos que mudar el misal de un lado para otro, teníamos que llevar las vinajeras, levantarle la casulla en la consagración, etc. etc.

Cuando llegaba la hora de la comunión y éramos dos los que estábamos ayudando la misa, uno cogia la patena y se ponía en la parte derecha del cura, para ponérsela a los que iban a comulgar debajo de la barba, y el otro con una palmatoria con una vela encendida, se ponía en la parte izquierda.

Pero cuando le tocaba ayudar la misa a uno solo, pues tenia que hacerlo uno todo, así que cuando llegaba la hora de la comunión, tenía uno que ponerse en la parte izquierda del cura cogia la patena con la mano izquierda y con la derecha cogia la palmatoria, de forma que la mano izquierda con la patena iba por debajo, y la mano derecha con la palmatoria iba por encima, formando como una especie de X.

Las mujeres para comulgar se ponían de rodilla todas muy juntas, en un reclinatorio grande de hierro que estaba debajo del altar, el cual tenia el mismo dibujo que tienen las barandillas del altar mayor, y en el que cabían cinco o seis personas.

Pues estando un día yo solo ayudando a la misa llego la hora de la comunión, y coji mis avios, que eran la patena y la palmatoria, y nos fuimos para bajo donde ya estaban todas las mujeres de rodillas en el reclinatorio esperando para comulgar (por regla general casi todas eran mujeres)

Que pasó que como estaban todas tan juntas unas de las veces que fui a ponerle la patena a una debajo de la barba, a la que estaba al otro lado le metí fuego al velo con la palmatoria, no vea la que se lió, pues al estar tan juntas y los velos que ardían como la tea, por poco me cargo a todas las que estaban comulgando, menos mal que las misma que estaban detrás le pudieron quitar los velos de un manotazo, si no se lía la de San Quintín. Así que ese día termine en el rincón castigado. “Pero yo me harte de reír… je, je, je je”,

viernes, 5 de febrero de 2010

EL COLUMPIO


Había frente a mi casa en el camino del faro, un árbol en el que los niños teníamos hecho un columpio, con una soga y una tabla con dos ranura, que nos servia de asiento, este columpio lo teníamos hecho en una rama que estaba muy cerca del tronco y nunca lo quitábamos porque siempre había algún niño montado jugando en el


Un día que estaba yo en mi casa me fui para el columpio y me puse a columpiarme y cuando estaba harto de pasearme, me puse a liarme en el columpio dando vueltas sobre mi mismo, (como si estuviera haciendo una trenza), a la vez que me iba liando, el columpio iba subiendo, de forma que llego un momento que los pies casi no rozaban el suelo.


Cuando vi que ya me quede casi en volanda, tome impulso con los pies, dando un empujón en el suelo, para desliarme muy rápido y así dar muchas vueltas, pero no conté con la proximidad del tronco con el columpio, y con la mala suerte que al tomar impulso se me fue el cuerpo para detrás sin darme tiempo a ponerme derecho ni a parar.


Que fue lo que paso? Que con el impulso que llevaba empecé a desliarme muy rápido, pero como tenia la cabeza boca arriba, como el niño del dibujo, cada vez que pasaba cerca del tronco me pegaba un chocon y como no atinaba a soltarme, vuelta a empezar otra vuelta y otro chocon en el tronco.


Hasta que mi hermana y Rita que estaban en la puerta de mi casa al escuchar los cochazo y los gritos salieron corriendo y me desliaron del columpio, llevándome a mi casa, me sentaron todo mareado en una silla y Rita que al estar casada con un americano, tenia un frigorífico empezó a ponerme hielo en la cabeza, con lo que se me alivio un poco, pero la cabeza la tenia con mas bulto que una vara de membrillo lo que me duro unas pocas de semanas….