jueves, 14 de octubre de 2010

"UN DÍA DE REBUSCO"

Hace algunos años, cuando la mayoría de los campos de Chipiona eran todos viñedos de uva moscatel, y uva listan, lo que era la vendimia, duraba, hasta dos meses, puesto que los medios de aquel entonces, tanto el de vendimiar, como el de trasportar la uva a las bodegas (se trasportaba en burros, y en carros ) eran diferentes a los que hay hoy, y aunque venían jornaleros, o vendimiadores, de otras poblaciones colindantes,(como las Güareñas) el mes y medio, o dos meses, tenían de trabajo.
Cuando se terminaba oficialmente la vendimia, llegaba el tiempo de lo que nosotros llamábamos, “el rebusco”, que consistía, en ir por las viñas que ya estaban vendimiadas, buscando cepa por cepa, los gajos de uvas que los vendimiadores, bien por pequeños, o bien por ir más rápidos, dejaban por detrás, rebusco que para nosotros los niños, era como un pasa tiempo más, con la ventaja que nos hinchábamos, de comer uva.
Pero, había muchas gentes que iban a rebuscar, y la uva que cogían, las vendían a los pequeños despachos, que tenían su propio lagar y con la uva del rebusco, y alguna pequeña viña que ellos tenían, pisaban y hacían su propio mosto, para luego venderlos por litros, o por vasos.
Muchos de los que iban a rebuscar para vender luego el rebusco, eran de los mismos que hacían la vendimia en los campos, y para sacarle un poco más de dinero a la venta de dicho rebusco,(sin que el capataz se diera cuenta), iban dejando algunas cepas por cortarle la uva para una vez terminada la vendimia, ir ellos que ya sabían más o menos donde estaban
y la vendimiaban como rebusco, teniendo cuidado que no llegara otro, y la vendimiara antes que él.

Explicado más o menos, lo que era el ir a rebuscar, el otro día cuando me fui a andar por el campo pase por una pequeña viña, y me acorde de esos días, cuando niño íbamos ha rebuscar, así que a la mañana siguiente cogí un cubito y volví a la viña donde me puse ha repasar las cepas cogiendo esos racimos de uva pequeños, que al estar más tiempo en la cepa están mucho más dulces, debo decir que la uva que recogí, es la “uva moscatel” la uva con la cual se saca el vino dulce con el mismo nombre,”vino moscatel”.
Lo malo que tiene el ir rebuscando, es que vas levantando las ramas de las cepas, y en cualquier momento dado, te puedes encontrar un "pupilo" como el que me encontré yo, el cual al verme se quedó igual de quieto, lo que aproveche yo para echarle la foto, y así da por terminado mi día de rebusco,
En el pago de “La Julia”, con un buen puñado de uva, y un buen susto con el dichoso “lagarto”






6 comentarios:

MAMÉ VALDÉS dijo...

Mi padre a mediados de los 70 aún compraba "El rebusco" para hacer el mosto, en El Chusco había un lagar donde se pisaba la uva para hacerlo, aún queda una prensa como testigo de aquello, un saludo pero sin lagarto je je je

Grupo PADA dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Anónimo dijo...

Interesante este concepto que no conocía del rebusco...
La uva moscatel, la mejor para mi gusto...el lagarto, lo veo yo y me muero alli mismo...
Aún sacaste un buen lote para comer...
Un saludo, Tony.

SEMA MIRANDA dijo...

lagarto,lagarto...si me lo encuentro yo me muero del susto y acabo con el rebusco pa los restos.Un abrazo

Pasto dijo...

El lagarto Guancho tiene una pinta extraordinaria. Todo un lujo encontrarse con un ejemplar como ese en los días que corren. Es el mejor protector de la viña, aunque de vez en cuando se regale el pico con alguna que otra uvita pasa. ¿Y quién no?... Se lo tiene ganado.
Me ha gustado mucho la entrada.

ARO dijo...

Estupenda faena esa de rebuscar, para aprovechar hasta el último grano de uva. También se rebuscaban por aquí los garbanzos y las aceitunas. Y lo del lagarto es una tontería asustarse, porque es un animal que no ataca a nadie, al revés, nos huye. La fotografía que has conseguido es rara de conseguir, porque el lagarto se quita de en medio en cuanto siente el más mínimo ruido.